Anoche, enganché el final de “Lost in Translation” por TNT. Pese a que la había visto un par de veces más, no pude evitar volver a verla y a publicar mi crítica.
La película básicamente trata la historia de dos personas, Bob y Charlotte (que son interpretados de manera brillante por Bill Murray y Scarlett Johansson), que se encuentran en Tokio por diversos motivos, y allí nace una importante relación entre ellos.
Bob, es un actor norteamericano que se encuentra trabajando en Japón, realizando algunos comerciales para una empresa de whisky, mientras que Charlotte, es la pareja de un fotógrafo que prácticamente no le pone atención y se encuentra más concentrado en su trabajo que en ella.
Estando en Tokio, se conocen, comienzan a conversar y se preguntan realmente que hacen ahí. Durante este tiempo la relación entre ellos es cada vez mejor y comienza a surgir un romance entre ellos.
El final, concluye con una gran escena en la que Bob tiene que irse de Tokio, pero antes de esto decide buscar a Charlotte para despedirla con un beso y unas palabras de despedida.
Como conclusión, una de las mejores películas románticas de los últimos años. Debo admitir, que me sorprendió la buena química que se nota entre ambos actores. Una simple mirada o algún gesto entre ellos, hacen que uno note a simple vista la conexión que hay. Además, el transcurso propio de la película, lleva a que uno tenga ganas que se den un beso de una buena vez.
